La semana pasada tuvimos la suerte de tener con nosotras a Vidalina Morales, compañera salvadoreña, lideresa comunitaria, defensora ambiental y miembro de la lucha contra la minería metálica en El Salvador.
Energética e incansable, en su paso por Euskal Herria, Vidalina Morales ha participado en siete jornadas en las que bajo el lema resistiendo al extractivismo, nos ha compartido la lucha de más de una década de las comunidades organizadas de El Salvador contra la minería metálica. Una lucha que se ha convertido en un hecho extraordinario en América Latina con la aprobación de la primera y única ley en el mundo que prohíbe esta práctica. Esta conquista no significa la ausencia de conflicto, pues las grandes empresas mineras continúan presionando para poder acceder al rico subsuelo salvadoreño. Pero sí que supone un ejemplo de logro que sirve como inspiración para otras luchas en otros territorios.
En las presentaciones que ofreció en la universidad – en la Escuela de Ingeniería de la UPV-EHU de Donosti, en la Escuela de Ingeniería de la UPV-EHU de Bilbao y en la facultad de Bellas Artes de la UPV-EHU en Leioa-, Vidalina hizo énfasis en la importancia de la academia en el acompañamiento de las luchas campesinas como herramienta para aportar estudios e informes que argumenten las problemáticas. Así fue en el caso de El Salvador, donde los estudios científicos tuvieron una especial relevancia para verificar los impactos ambientales que estaba ocasionando la minería.
El documental No tenemos miedo, del que Morales es protagonista, recoge este proceso de lucha contra la minería metálica. Se proyectó este audiovisual además de en las facultades previamente mencionadas, en el centro cultural Koldo Mitxelena en Donosti, en el cine Leidor en Tolosa y en la casa de las mujeres de Basauri, Marienea. Después de las proyecciones el público pudo compartir dudas e inquietudes con la defensora de derechos humanos.
Por último, la actividad estrella tuvo lugar en la sala Bilborock de Bilbao junto a Silvia Federicci, Rosa Lago, Sara Ibañez y Estitxu Villamor, activistas ecofeministas que compartieron sus luchas por el medio ambiente desde una visión feminista. Todas hicieron hincapié en el hecho de que los impactos ambientales afectan directamente a las mujeres. Morales habló de cómo los problemas de agua afectan especialmente a las mujeres, motivo por el cual la lucha en El Salvador estuvo en gran medida liderada por ellas, con todo lo que supone para una mujer en El Salvador salir de casa y de la comunidad para ir a la lucha.
En definitiva, la visita de Vidalina Morales a Euskal Herria ha sido un proceso de aprendizaje. Conocer la labor de las mujeres salvadoreñas en la defensa del territorio y de los Derechos Humanos es fuente de inspiración para otras luchas y para otros territorios en resistencia.