Mikel Molinos Gutiérrez nos comparte sus impresiones del primer día de seminario: Joseba Sainz De Murieta, como parte de ISF-MGI, facilita la primera sesión Tecnologías para la Transición Ecosocial; y Cony Carranza, educadora popular feminista y antirracista, facilita la segunda sesión Procesos participativos al servicio de la transformación social
Ingeniería Sin Fronteras (ISF) y otras asociaciones afines han enfocado sus acciones en la llamada Transición Ecosocial (TEC). Este es un concepto sumamente complejo que lentamente empieza a penetrar en diferentes ámbitos, tanto profesionales como académicos. De cara al seminario “Desarrollo Cooperación y Tecnologías para la Transición Ecosocial”, ISF ha desarrollado junto a dos ponentes una sesión informativa para aclarar el significado de la Transición ecosocial y de otros términos similares.
En la primera charla, impartida por Joseba Sainz de Murieta, se ha hablado sobre la situación actual, tanto económica como ambiental, y el papel del avance científico en esta. Ha sido sumamente informativa y preocupante, pues ha mostrado como el desarrollo de los países ha provocado efectos muy dañinos tanto en los sistemas que hacen el planeta habitable como en las diferentes formas de vida del planeta (incluyendo a la humana). Se ha comentado como las herramientas tradicionales para medir el “progreso”, basadas en el crecimiento económico y en el consumo, aún siguen vigentes, aunque lleven mucho tiempo siendo cuestionadas. Uno de los puntos más importantes ha sido la definición actual de la ciencia y la tecnología, la cual sigue desligada de parámetros sociales, políticos y filosóficos. Ha quedado manifiesta la necesidad de una transición, no como una vía para evitar las consecuencias de la actual forma de vivir sino también para redefinir la forma de ver el mundo. Para ese objetivo se han de considerar las llamadas Tecnologías de TEC, las cuales son sirven para aunar soluciones basadas en la ciencia con la colaboración de las comunidades y el progreso de la sociedad.
En la segunda charla, impartida por Cony Carranza, se ha desarrollado una visión alternativa para afrontar la educación. Ha sido una experiencia enriquecedora para los participantes, que han podido de emplear cuerpo y mente en diversas actividades destinadas a concienciar sobre ciertos temas: la inmigración y su efecto en las mujeres; la necesidad de afrontar las raíces polémicas de la desigualdad; las nuevas formas de enseñar y aprender, más allá de las formas jerárquicas tradicionales… Un concepto, surgido de raíces indígenas, muy interesante ha sido el llamado Buen Vivir o Utz k´aslemal, una filosofía de vida y organización basada en considerar la vida, humana o no humana, y su dignidad como referente de bienestar en lugar de la riqueza o el poder.
En conclusión, las charlas han resultado ser informativas y emotivas. Aunque han sido llevadas a cabo por personas muy distintas y se han desarrollado mediante diferentes metodologías, ambas han tenido en común una serie de aspectos: en ambas se habla de redefinir el significado de progreso y bienestar frente a las actuales ideas hegemónicas; en ambas se ha hecho hincapié en la necesidad de afrontar el idealismo y las controversias para afrontar la realidad; en ambas se presenta la transición no como un desafío a superar, sino como una oportunidad de cambiar a mejor la situación actual del planeta y la civilización; y, por último, en ambas se ha concluido que la transición debe realizarse poniendo en el centro a las personas, respetando su contexto y empleando herramientas más allá de la razón y los datos. En pocas palabras, los encargados de las charlas han concluido que la ocasión para realizar una verdadera transición ha llegado, y es necesario realizarla unidos.