Crónica elaborada por Nagore Cebrián (ISF/MGI)
Tras horas y horas en varias sesiones de trabajo, desde ISF-MGI varios agentes académicos y sociales
han reflexionado sobre la trascendencia de la práctica de la devolución en las investigaciones y han
recopilado los hallazgos fundamentales en el Cuaderno de Trabajo titulado “Acercándonos a la idea y
práctica de la devolución. Una oportunidad para el diálogo deliberativo y la construcción colectiva de
conocimiento en los TFG/ TFM”. Tras su publicación, se creó un grupo de alumnas y exalumnas para
reflexionar acerca de los procesos de devolución en sus trabajos de investigación, creando un espacio
de confianza entre personas que están inmersas en sus investigaciones y personas que ya las
terminaron. El Cuaderno de Trabajo fue compartido entre las integrantes del grupo y pudimos
empaparnos del trabajo realizado para posteriormente, durante meses de septiembre y octubre, en dos
sesiones conjuntas escuchar y compartir nuestras experiencias.
En el primer encuentro contamos con la presencia de Ruth Nevado y tratamos conceptos como qué es
la devolución, por qué es importante y cómo se puede llevar a cabo. Tras poder compartir reflexiones
acerca de este tema, se nos facilitó una batería de preguntas y se nos invitó a reflexionar sobre
nuestros trabajos y la devolución realizada o por realizar. En el segundo encuentro compartimos
nuestras reflexiones y tuvimos la oportunidad de escuchar los comentarios de las compañeras acerca de
cada reflexión. Con este ejercicio cada una pudo completar su proceso de reflexión individual con las
aportaciones de las compañeras.
Personalmente, me encuentro redactando mi primer trabajo de investigación, el Trabajo de Fin de
Grado, por lo que me pareció muy interesante y enriquecedor poder informarme sobre los procesos de
devolución dentro de un trabajo de este tipo y el haber podido escuchar las experiencias de otras
compañeras, para así tener en cuenta los aspectos a mejorar que ellas destacaban.
Tras estos encuentros pude responder a las cuestiones debatimos con Ruth el primer día y dar respuesta
a la cuestión: “y yo, ¿qué puedo hacer diferente?”. La devolución es un proceso multidireccional entre
la autora de la investigación para la transformación social y los sujetos con quienes se trabajan de forma
participativa; comprendiendo su realidad, sus intereses y su cultura, atendiendo a las necesidades de
ambas partes y empleando un lenguaje adecuado para una comunicación efectiva.
Es por eso que es un proceso que debe estar presente desde el primer momento en el que se plantea la
investigación, ya que no es “otro trámite más” dentro del estudio al que prestar atención únicamente en
la etapa final del mismo. Tenemos que construir objetivos juntas (investigadora y comunidad
beneficiada) y responder a cuestiones como “¿qué se espera de la investigación?”, “¿la comunidad está
interesada?”, “¿qué les interesa?”. La devolución es un instrumento para empoderar a las personas, he
aquí la importancia de este proceso.
Y para llevarla a cabo debo tener en cuenta tres ideas: en primer lugar, ser consciente de que no es un
proceso aislado de la investigación y requiere de unos compromisos iniciales; a continuación, la
necesidad de conocer al interlocutor, su cultura, intereses, sueños, historia, etc. y, por último, estar
abierta en todo momento al diálogo. Y precisamente esto es lo que puedo hacer diferente.
Si tuviera que resumir con qué me quedo de las sesiones sería con que el proceso de devolución no es
solo al final del proceso, es algo que tiene que estar integrado al proyecto y las personas investigadoras
como las investigadas estar en coordinación y comunicación para un proceso de devolución
participativo y que de los frutos deseados.